La Escultura
Portada principal. En el tímpano se desarrolla el tema de la Adoración de los Reyes. Encontramos ligeramente desplazada hacia la derecha a la Virgen sentada en posición frontal y en su regazo se sienta el Niño. La posible pérdida de categoría de María con el Niño, al no ser el eje de la composición, es compensada dándole una mayor anchura y altura que a las demás figuras. A su derecha se encuentran los Reyes Magos y a la izquierda se sitúa San José. En las esquinas aparecen dos arquitecturas, de una de las cuales asoman las cabezas de los tres caballos de los Magos.
Las cuatro arquivoltas son de arco de medio punto, disponiéndose en la interior once figuras en forma radial situándose en el centro el Salvador coronado, a su izquierda San Juan y a su derecha San Pedro con las llaves y a ambos lados cuatro ángeles coronados.
La Portada Norte. En ella vemos una narración sintética de la leyenda del martirio de Santa Catalina de Alejandría, que aparece en el centro del tímpano con las manos en actitud de oración. La rodean cuatro ruedas como atributo y símbolo del martirio. A la izquierda, y también de pie, se encuentra Maximino (ejecutor de Santa Catalina) que parece sostener una espada con la que degolló a la Santa. Tras él, el demonio, espíritu del mal, le instiga al oído. A ambos lados de la Santa una paloma, que la alimentó mientras estaba en prisión y un ángel que baja del cielo con una espada intentando romper una de las ruedas como dice que sucedió durante el martirio. El tímpano es sostenido por dos ángeles alados haciendo la función de mochetas.
La Portada Sur. Es como las dos anteriores, de arco de medio punto y arquivoltas que apoyan sobre columnas con capiteles vegetales e historiados. En el tímpano, ocho personajes se distribuyen simétricamente en torno a uno central de mayor tamaño y categoría. La escena parece representar a un Abad rodeado de ocho monjes en actitud orante.
Ya en el interior del templo la decoración se localiza básicamente en los capiteles que se decoran con motivos vegetales, realizados en torno al S.XIII; motivos historiados como una escena de la Epifanía y una escena de caza; o motivos zoomórficos.
Otras esculturas que encontramos en el interior del templo son: Una Anunciación con una figura que representa a María en actitud humilde y la otra al Arcángel San Gabriel con intención de dirigirse a la Virgen. Hay también una credencia o sagrario situada en el baptisterio.
Una serie de sepulcros se han ido instalando en las naves y en el presbiterio de la iglesia. Son de religiosos de la Colegiata y de nobles coruñeses benefactores de la misma. El sepulcro más interesante es el que encontramos en la pared norte del presbiterio, perteneciente al primer abad de la Colegiata, D. Fernando Bermúdez de Castro. Parece ser obra de principios del siglo XVI. Otros sepulcros están situados en las naves laterales.